Maite Iglesias

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CONSEJOS SOBRE LA ELECCIÓN DE LAS CUERDAS DE TRIPA

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Consejos sobre la elección de cuerdas de tripa Maite Iglesias

Antes de decantarnos por unas cuerdas de tripa u otras, merece la pena tener en cuenta algunas consideraciones: las cuerdas de tripa se rompen y desafinan con cierta facilidad ya que es un material orgánico que se desgasta con el uso, el sudor y el roce. Así pues, los puntos que sufren un mayor nivel de deterioro son, por un lado, aquellos por los que pasa el arco y, por otro, aquellos donde colocamos los dedos. Concretamente, la cuerda Mi, al ser la más fina, es la primera que suele romperse (si se practica con frecuencia, suele durar aproximadamente un mes). 

Por otro lado, es muy probable que cuando coloquemos la cuerda en el violín, esta tarde unos días en estabilizarse (cuando son nuevas se desafinan con facilidad). Lo ideal es poner la cuerda un día antes de su uso y dejarla afinada casi medio tono alto porque lo que pasará es que en ese periodo de tiempo la afinación bajará por sí sola. Por ello, recomiendo que, si tienes previsto un concierto, prepares las cuerdas tal y como explico en la siguiente sección para que, en caso de que se te rompa alguna cuerda, pierdas el menor tiempo posible.

 

Preparación de las cuerdas

Las cuerdas de tripa III, II y I que se venden las tiendas especializadas suelen medir el doble de la longitud que es realmente necesaria para tocar el violín y, por lo tanto, hay que cortarlas por la mitad. Hecha esta aclaración, mis recomendaciones para la preparación de las cuerdas son las siguientes:

1.     Lavarse las manos antes de empezar a manipularlas.

2.     Dejarlas sumergidas en aceite de oliva durante una hora. 

3.     Secarlas con papel absorbente. Con esto conseguiremos que las cuerdas estén mejor hidratadas y se romperán menos.

4.     Cortar por la mitad la cuerda que queramos utilizar.

5.     Hacer un nudo doble en uno de sus extremos.

6.     Colocar la cuerda en el cordal.

7.     Insertar en la clavija correspondiente el extremo que hemos dejado sin nudo.

8.     Es importante tener en cuenta que el calor y la fricción de los dedos hace que la tripa se dilate. Dicho esto, para afinar la cuerda de tripa primero hay que tensarla por encima de su punto de afinación exacto y luego destensarla hasta alcanzar el ajuste necesario. Al mover la clavija, la cuerda suele hacer ruido, lo que no nos debe preocupar ya que es totalmente normal. 

9.     Mientras afinamos la cuerda, es conveniente estirarla con los dedos en toda su longitud, como si la masajeásemos, estirándola desde el mástil hasta el puente. También, pasando la mano por encima, se puede calentar para que baje la afinación y luego subirla con la clavija.

10. Hacer resonar la cuerda con el arco y dejar la cuerda impregnada de resina. Esto ayuda a que la cuerda resbale menos. En este sentido, a diferencia de las cuerdas metálicas, cuando termines de tocar no es necesario limpiar la zona de fricción con el arco.

11. Por último, es importante dejar bien colocada la clavija, de tal manera que los movimientos para afinarla sean cómodos. Es más, si la clavija no quedase bien alineada al colocar la cuerda, se debe tirar ligeramente del extremo introducido en la clavija hasta que la orientación de ésta se reajuste. 

Mis recomendaciones para la elección de grosores de cuerdas de tripa son las siguientes:

  • Cuerda Sol Pirastro Oliv: tripa entorchada en plata (la cuerda Sol es la única entorchada, el resto es de tripa natural). Precio estimado: 60 euros.

  • Cuerda Sol Pirastro Eudoxa. Precio estimado: 25 euros.

  • Cuerda Re (calibre: 112 centésimas de milímetro). Precio estimado: 12 euros.

  • Cuerda La (calibre: 74 centésimas de milímetro). Precio estimado: 10 euros.

  • Cuerda Mi (calibre 64 centésimas de milímetro). Precio estimado: 8 euros.

Cuerdas de tripa que son más que tripa

Aunque las cuerdas de tripa tradicionales se fabrican únicamente con intestinos de oveja o vaca, hay algunas marcas de cuerdas de tripa más recientes que incorporan otros materiales a sus cuerdas. He aquí algunos ejemplos:

Passione: Las cuerdas Passione están fabricadas por Pirastro y combinan la tripa con otros materiales como el acero, la seda y la plata. Están diseñadas para producir un sonido cálido y rico.

Chorda: Las cuerdas Chorda también son de Pirastro y se fabrican mediante un proceso de producción único que da como resultado un sonido de cuerda de tripa muy auténtico. Sin embargo, puede que no sean tan duraderas como otras marcas de cuerdas de tripa.

Gut-a-like: Las cuerdas Gut-a-like son cuerdas de tripa sintética diseñadas para imitar el sonido y la sensación de las cuerdas de tripa tradicionales. Son una opción popular para los músicos que quieren el sonido de las cuerdas de tripa sin la fragilidad. En general, hay muchas opciones en lo que respecta a las cuerdas de tripa, y es importante tener en cuenta tu estilo de tocar, tu instrumento y tu presupuesto a la hora de elegir la marca adecuada. Las cuerdas Dominant son una opción popular y fiable, pero puede merecer la pena explorar algunas de las marcas más recientes de cuerdas de tripa que incorporan otros materiales para conseguir un sonido único.

Instalación y mantenimiento de las cuerdas de violín

  • Las cuerdas deben cambiarse al menos una vez cada seis meses.

  • Las cuerdas también deben cambiarse si se desgastan, dañan o pierden calidad de tono.

  • Si tocas el violín con regularidad, puede que necesites cambiar las cuerdas con más frecuencia.

  • La tensión de las cuerdas puede afectar a la calidad del sonido de tu instrumento.

  • Una cuerda de tensión más alta producirá un sonido más brillante y potente, mientras que una cuerda de tensión más baja producirá un sonido más oscuro y suave.

  • Es importante encontrar el equilibrio adecuado entre tensión y calidad de sonido que se adapte a tus preferencias personales.

  • También es importante hacer pequeños ajustes en la afinación y la tensión de tus cuerdas según sea necesario, sobre todo en respuesta a cambios atmosféricos o cuando tu instrumento se adapte a un nuevo juego de cuerdas.

En resumen, el mantenimiento de las cuerdas de tu violín es una parte importante para garantizar que tu instrumento produzca la calidad de sonido deseada. Sustituir regularmente las cuerdas desgastadas o dañadas, seguir las técnicas de instalación adecuadas y ajustar la tensión de las cuerdas puede contribuir a mejorar la experiencia general de tocar. Si cuidas las cuerdas de tu violín, podrás seguir tocando música hermosa durante muchos años.

Preguntas más frecuentes

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Hola, soy Maite, autora de este blog, profesora de violín y especialista en violín moderno y barroco. Leer más

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